De regreso a casa

Un 5 a 0 casi definitivo al Bolívar y un pie y tres cuartos más en la Final de la Libertadores. Pero 24 horas antes el Presidente de San Lorenzo había encabezado el “Congreso por la Vuelta a Boedo”, donde se presentó el anteproyecto de nuevo estadio en el predio de Avenida La Plata. Lammens comunicó que el club podría tomar un crédito en dólares en el exterior para la construcción.

El máximo sueño de todo San Lorenzo está llegando. En la ‘Casa del Vitalicio’, varias autoridades del club formaron parte del cuarto “Congreso por la Vuelta a Boedo”, donde se presentaron diversas propuestas con la finalidad de avanzar en el proyecto para volver al terreno de Avenida La Plata. También integraron la mesa de debate los arquitectos Claudio Pando y José Rozados, disertando sobre las implicancias de los planes y el impacto urbanístico que tendrá en el lugar, beneficiando a la comunidad en general. Allí se conocieron los nuevos anteproyectos del estadio y polideportivo que se planean construir en la zona.
El mandamás Matías Lammens tomó la palabra para comentar el estado actual de las negociaciones con el hipermercado que ocupa el predio y pasó a detallar algunas cuestiones clave en torno a la construcción del estadio.
“Calculamos que costará cerca de 75 millones de dólares”, reveló el presidente, una cifra que está muy por encima de las posibilidades de cualquier club del país. No obstante, continuó afirmando que “somos responsables y tenemos en vista varias ideas para financiar las obras”.
“Una alternativa es armar un fideicomiso de obras, pero lo más probable es tomar un crédito en el extranjero con tasas bajas, sin comprometer la economía de San Lorenzo”, detalló. A la vez, explicó que “es un riesgo tomar deuda en dólares” pero dejó en claro que “debemos explotar comercialmente el estadio para conseguir fondos, por ejemplo con recitales, y estamos hablando con varias empresas interesadas en eso”.
Por otro lado, el dirigente propuso bautizar el estadio con el nombre “Papa Francisco”. A su vez, insistió con la posibilidad de inaugurarlo en 2016, cuando el Sumo Pontífice llegue por primera vez a la Argentina como Jefe de Estado del Vaticano.
Retomando al proyecto, se expusieron imágenes del polideportivo que será levantado justamente al lado del futuro estadio, aunque el mismo se solventará con los recursos que serán suministrados por las autoridades del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, a cambio de la cesión del espacio para la utilización de colegios y mutuales de Boedo. El mismo será aprovechado para básquet, handball, futsal y otras disciplinas federadas, teniendo una capacidad de 1.000 personas sentadas en sus tribunas retráctiles.
Vale destacar que antes comenzar con los trabajos y las obras, San Lorenzo tendrá que resarcir económicamente a la cadena de supermercados Carrefour con un monto aproximado de 100 millones de pesos (el Banco Ciudad lo tasó en 94, pero el Banco Nación hará otro estudio).
Mediante el fideicomiso por la “Vuelta a Boedo”, que consiste en la venta simbólica de los 35.600 metros cuadrados que abarca el terreno en cuestión, los hinchas siguen aportando de su bolsillo para cumplir su sueño. Hasta ahora se juntaron 60 millones y aspiran a cubrir la totalidad a fin de año.