No más bolsas en los súper

Para Macchiavelli el problema son las bolsas plásticas. ¿El regreso a los patógenos tachos de basura?

A partir de hoy, domingo 1° de enero de 2017, los hipermercados, supermercados y autoservicios de la Ciudad no entregarán bolsas plásticas de ninguna naturaleza. Se pone en marcha efectiva una medida que contiene una incongruencia que parece haber pasado inadvertida a las autoridades que la ejecutan: ¿en qué bolsas se colectará la basura domiciliaria que hasta ahora se acumulaba en esas bolsitas plásticas?

Cada comprador deberá llevar sus propias bolsas o aquellos changuitos que cayeron de su empleo masivo hace tiempo –se redujeron a su uso por la gente de mayor edad–, y de acuerdo a estas nuevas medidas, tienen una nueva oportunidad de éxito.

Al respecto señalaba Eduardo Macchiavelli, Ministro de Ambiente y Espacio Público de la Ciudad “Sabemos que este tipo de bolsas contamina el agua, tapa sumideros y afecta a la flora y fauna. Estamos acompañando a los vecinos en este gran cambio cultural, para que todos podamos disfrutar de una ciudad más limpia y verde”.

Un slogan puede contribuir a un cambio cultural. ¿Quién puede oponerse a “una ciudad más limpia y verde”. En las palabras del funcionario está el interrogante: “Sabemos que este tipo de bolsas contamina el agua, tapa sumideros y afecta a la flora y fauna”.

De hecho, esa contaminación sólo se produce cuando las bolsas son utilizadas para “envasar” los residuos domiciliarios. Y la solución que aporta el Gobierno de la Ciudad es hacer desaparecer el envase. ¿Y en qué se transportarían esos desechos hasta los contenedores?

En 2012 en la ciudad de Buenos Aires, se elaboró un programa de implementación de la ley 3147, que entre otras cuestiones estableció que los supermercados, hipermercados y autoservicios reemplacen las bolsas comunes de plástico, por otras igualmente de plástico, pero que cumplan con la norma IRAM 13.610. Desde entonces los sufrientes habitantes porteños estamos pagando –precio actual 50 centavos la unidad– por bolsas –“reciclables”, nos decían– fabricadas bajo Norma Iram 13.610, y, de paso, financiando la campaña “Ciudad verde” con nuestro óbolo. “Soy más grande y más resistente. ¡Llename hasta el tope!” Cubre la leyenda que supera holgadamente el 11% recomendado por la Norma 13.610¹ y que contiene, por supuesto, en grandes dimensiones el isotipo BA.

Resultó ser que la citada norma se ocupa sólo de las dimensiones de la bolsa y la calidad de la misma. El material², lejos de ser reciclable, es el mismo utilizado para las descartables, hasta ese momento gratuitas, y la calidad del mismo: resistencia a la tracción (RT), elongación a la rotura (ER) y resistencia al desgarre. La propia norma incluye a su pie en un ítem titulado “trámite” la aclaración sobre que “en el estudio de este esquema no se han considerado, por no corresponder, los aspectos Ambientales, de Salud y de Seguridad”.

Fue tan obvio el negocio con estas bolsas. Quedó tan claro el gatopardismo de este “cambio” hecho a la medida de la preservación de los intereses de la industria del plástico, que apareció la necesidad del golpe de timón. La verdad a medias del ministro señala “Estamos acompañando a los vecinos en este gran cambio cultural”.

Sobre los desechos urbanos se necesita un “gran cambio cultural”, pero, claramente, las medidas que adopta se quedan en la cáscara y, lo más grave, se desentienden de la culminación del necesario cambio. La línea publicitaria de la campaña gubernamental sobre los desechos tiene esa pata renga. Y la práctica vecinal puede estropear las mejores intenciones.

Está claramente ausente la difusión de cómo y en que envase acumular los residuos domiciliarios para llevarlos al contenedor. Y hete aquí que es allí, en los basurales, donde el plástico tiene su ruin efecto sobre la naturaleza. Sí, seguramente despojamos a la Ciudad del problema…, se lo pasamos al Conurbano.

Desde hace unos meses, previendo la implementación que hoy se lleva a cabo, el Gobierno porteño entregó más de 500.000 “ecobolsas” –como las denomina, “eco” tiene prestigio– reutilizables a los vecinos en diferentes plazas y parques. Esta vez, por lo menos, cuidaron de no trasladarnos los costos de la campaña impresa externamente, distribuyéndolas gratuitamente  en todas las Comunas.

 

En la nuestra –Comuna 5: Almagro- Boedo– el Ministerio de Ambiente y Espacio Público estará entregándolas en los siguientes lugares:

Entrega en puerta de supermercados

Lunes 02/01

Carrefour: Avenida La Plata 1768, de 16:30 a 19:00hs

 

Miércoles 11/01

Sede Comunal 5: Carlos Calvo 3307 de 11:00 a 14:00 hs

Miércoles 04/01

Av. Corrientes y Medrano (cercanía subte) de 17:00 a 19:00 hs.

 

(*) Norma IRAM 13.610. 4.2.2 En las bolsas con impresión comercial, la impresión debe estar en conformidad con el logotipo, centralización y color solicitado por los clientes. Se recomienda que la superficie impresa de la bolsa no supere el 11% de la superficie total de cada cara.

(*) Norma IRAM 13.610. 4.1 Material 4.1.1 Las bolsas se deben fabricar con resina de polietileno.