Los “amigos” de Facebook
Resulta ser que “amigo”, para Facebook, dejó de ser lo que uno consideraba “amigo”. Mario Bellocchio
Lo que no cabe duda alguna, como sí tuvo la Justicia para declararlo culpable de esa denuncia, es que el tipo es un “nerd” desde chiquito y que su cerebro tiene circunvoluciones inusuales que le proveen dotes extraordinarias expresables en francés, hebreo, latín y griego antiguo, a más de su natal inglés. Vale decir que su capacidad es desbordante y que en base a ella ha logrado que desde 2010, la revista Time lo haya nombrado “Persona del año”, entre las 100 personas más ricas e influyentes del mundo. A mediados de 2018, Forbes lo colocó como la quinta persona más rica del mundo*.
Según la revista Vanity Fair, el famoso fundador de Facebook se mostró en el primer puesto de las personas más influyentes del mundo de la tecnología en el año, y superó a Steve Jobs, fundador de Apple Inc., ya fallecido, y a Serguéi Brin y Larry Page, fundadores de Google.
Resulta ser que “amigo”, para Facebook, dejó de ser lo que uno consideraba “amigo”. Recuerdo particularmente una vez que me preguntaron si una persona era amiga mía y respondí con el generalizado concepto, perimido por Facebook, de que “amigos” son unos pocos elegidos, los demás son “conocidos” y punto, valorizando aquella añeja fraternidad original del término. La Biblia y el calefón de Discépolo o el “ségual” de Minguito visto desde un ángulo captador de intimidades negociables por un “bobina” que le descubrió el agujero al mate y lo hizo guita y prestigio.
Mientras tanto, gracias a Zuckerberg media humanidad puede sentirse Roberto Carlos complacido con un millón de “amigos a lo Facebook”, relaciones circunstanciales entre las que, como aguja en el pajar, de vez en cuando surge alguno/a que no te pregunta “cómo está el tiempo por ahí” o habla de otra cosa que no sea una “propuesta de relación seria” después de averiguar subrepticiamente que tenés algún mango en el bolso. Porque para tirarle de la lengua a los asociados y lograr que cuenten intimidades que luego son vendidas al mejor postor, don Zuckerberg, un especialista.
Sin embargo, hay que reconocer que no solo hay azotes en la casa de Caifás… El “Rincón de Markitos” tiene sus aristas rescatables. Repentinamente reaparece un “amigo con diploma” del que uno no tenía ni noticias. O como perla de la ostra ignota brota una amiga/o con interesante intercambio, tu propia publicación logra un rebote interesante o te encontrás con publicaciones de real interés, dicho sea aparte de que ya corrigieron el intolerable “me gusta” aplicado como única opción a estar de acuerdo o acompañar los sentimientos, por ejemplo, de una muerte querida, entre otras tragedias comunicadas vía Facebook. Y el whatsapp que ayudó y los ha puesto a salvo de estas gansadas.
Bueno…, estas excepciones –que confirman la regla– son el anzuelo que tira Zuckerberg para mantener las expectativas, acrecentarlas y comercializar sus espacios, entre otras, a firmas que te “venden” un juego completo de herramientas de primera calidad al precio que, normalmente, podrías comprar solo una pinza, herramientas que solo verás expuestas en atractivas fotos y que algunos, en su ambición, entran como caballos y “compran”.
En algún momento difundí, a través de Facebook –y está bien reconocerlo– lo que sigo considerando una buena síntesis de la creación de Markitos.
Facebook lo invita a…
- Hacerle decir a Mafalda cosas que nunca dijo.
- Iniciarse en filosofía oriental con aforismos de Narosky.
- Invitar a cadenas por las que más convendría “tirar la cadena”.
- Inscribirse en la difusión de cosas que no entiende en absoluto sólo porque las dicen los que están de su lado.
- Y no olvide que éste es el mejor lugar para decir pelotudeces con énfasis.
Y como no solo con Facebook se intoxican el hombre, la mujer y el resto a don Elon Musk se le ocurrió el diabólico Twitter que de inmediato sentó plaza de difusor público de las más disímiles ponencias, desde chusmerío de intimidades de la farándula –nivel Z– a anticipo de decretos gubernamentales antes de pasar por la aprobación del Congreso. Las llamadas “redes sociales” se han instalado en calidad de cloacas. Y más de un lawfare se maneja con los piolines que a Musk se le ocurrió inventar. Aquí la amistad no se solicita ni se otorga, “los amigos se cotizan en las buenas y en las malas”, diría Carlitos y completaría “A mí me dieron la chaucha y la reparto con vos”.
(*). Staff, Forbes (6 de marzo de 2018). «Los multimillonarios de Forbes 2018: las 5 personas más ricas del mundo • Forbes México». Forbes México.
FUENTE DE DATOS:
WikiLeaks (del inglés leak, «fuga», «goteo» o «filtración [de información]») organización mediática internacional sin ánimo de lucro que publica a través de su sitio web informes anónimos y documentos filtrados con contenido sensible en materia de interés público, preservando el anonimato de sus fuentes. El lanzamiento del sitio se realizó en diciembre de 2006, si bien su actividad comenzó en julio de 2006-2008. Desde entonces su base de datos ha crecido constantemente hasta acumular 1,2 millones de documentos.? Su creador es Julian Assange.
ILUSTRACIONES DE Pawel Kuczynski
Pawel Kuczynski es un ilustrador nacido en Szczecin, Polonia. Se graduó en Bellas Artes por la universidad de Poznan, especializándose en estilo gráfico.
A sus 36 años ha ganado 92 premios tanto nacionales como internaciones, en las secciones de caricatura e ilustración.
Su obra es muy amplia, pero destaca en la sátira política, social, económica y medioambiental, donde muestra su lado más crítico en los temas de actualidad.