El Gobierno porteño demuele por error
Barrio padre Carlos Mugica (Ex Villa 31). Demolición por error. Mario Bellocchio
El conflictivo espacio de la ex Villa 31 codiciado inmobiliariamente desde siempre por el alto valor del metro cuadrado que supone su “privilegiada” ubicación vuelve a estar en el centro del conflicto. Esta vez se “reconoce”, por lo menos, el error que estuvo ahí, a segundos, de cobrarse vidas humanas. Una empresa contratista –Villarex– debía demoler la ex vivienda de una familia ya reubicada, con la celeridad que les exige el Gobierno porteño a fin de que no sea rehabitada clandestinamente. Parece ser que la factura de la tarea como corresponde –poniendo a salvaguarda la vivienda vecina que compartía la loza– requería una tarea más compleja que la que encararon los obreros de la empresa contratada para la misma y, sobre todo, el aviso a las familias que podían verse afectadas tangencialmente (como sucedió). Cuando los operarios advirtieron la inminencia del derrumbe, recién dieron aviso. Y los afectados apenas pudieron abandonar el lugar con la premura necesaria sin llevar más que lo puesto. Ahí, entre los restos, quedaron sus enseres , ropas y objetos personales sin que, hasta el momento, hayan podido regresar al lugar para recuperarlos dado el peligro que significa esta precaria situación.
El lunes 23 de enero, aun sin nada resuelto, la Agencia Paco Urondo estuvo en el lugar de los hechos y dialogó con Silvana Olivera, vecina y referente de la organización “Peronismo por la ciudad”, quien milita en el barrio y también pertenece a la Mesa de Urbanización y al comité de crisis que acompaña a las familias que quedaron en la calle tras perder su vivienda por el derrumbe provocado por el GCABA.
–APU: ¿Cómo se desencadenó la situación que derivó en el derrumbe?
–Silvana: “Es un sector que está en proceso de demolición. Están con obras, tirando viviendas y relocalizando familias. Ellos debían derrumbar una vivienda de una familia que ya fue relocalizada, tenían que demolerla. Está pegada a la comisaria que está bajo la autopista Illia.
Empezaron a demoler, con una demolición gruesa. Con gente sin experiencia. La empresa de demolición se llama Villarex, que la contrató el Gobierno de CABA para las demoliciones del sector. Mientras hacían la demolición tocaron las bases de la vivienda lindante, la cual estaba habitada. No habían informado a las familias que esa casa lindante seria demolida.
Esto comenzó a las 14 hs y en quince minutos se vino abajo toda la estructura. Tuvieron suerte los habitantes de la casa demolida de poder salir porque se cayeron los escombros y huyeron. Fue una negligencia de la empresa por no avisar a las familias que se iba a demoler la vivienda de al lado.
Además, el personal encargado de realizar la demolición evidentemente no tenía experiencia. Se cayó la vivienda. Son tres pisos. Cuenta con un pasillo largo, donde hay más viviendas en la parte del fondo. Todas las familias de las viviendas pudieron salir.
A las 17 horas se cortó la energía del sector para evitar corto circuitos. A las 20 horas se inicia un incendio en las viviendas del fondo. En ese incendio las familias perdieron todo. Los bomberos no pudieron ingresar debido a los escombros como consecuencia del derrumbe y aun no se construyeron las calles nuevas que todavía son pasillos. Eso también falta del proceso de urbanización. Eran familias que no habían sido afectadas por la demolición y el derrumbe. Entonces las familias salieron con lo puesto. No tenían dinero, ni documentación. Todo quedo en las viviendas”.
–APU: ¿En qué situación están los vecinos ahora?
–“S.O..: Ellos están esperando una respuesta del Gobierno de la Ciudad para alcanzar una solución a la negligencia de la empresa contratada por ellos. Esperan una respuesta porque sus viviendas no estaban afectadas para el proceso de relocalización. Por lo tanto sus viviendas no debieron ser demolidas. Las familias exigen que se les construyan nuevamente las viviendas que les destruyeron. O que los reubiquen en otras viviendas para poder estar tranquilos con sus familias. Fue responsabilidad del Gobierno de CABA que les tiraran las casas. Esperan una solución para todas las familias, no solamente a algunas. Entre los damnificados hay propietarios e inquilinos.
Obviamente el Gobierno de la Ciudad debe dar una respuesta. Hay casi cien personas en situación de calle hoy durmiendo en la intemperie bajo la autopista Illia. No se mueven de ahí porque en las viviendas están sus pertenencias y quieren una respuesta rápida del Gobierno de la Ciudad y de la Unidad de Proyectos Especiales Barrio Múgica que es quien lleva a cabo los proyectos de urbanización y está a cargo de Tomas Galmarini”.
–APU: ¿Se acercó alguien del Gobierno de la Ciudad?
–“S.O.: Se acercaron y estuvieron presentes y se hicieron cargo de la negligencia cometido por la empresa contratada por ellos mismos. Eso está muy bien, pero las familias esperan ahora una respuesta rápida. No pueden seguir a la intemperie sobre todo con niños. Hay personas con discapacidades, hay personas adultas mayores. Los damnificados cuentan con diversas edades. Hay una señora con cáncer. La realidad es bastante compleja y estamos esperando que acción va a llevar a cabo el Gobierno de la Ciudad para dar una solución pertinente al problema.”
–APU: ¿Qué medidas para reclamar van a implementar los vecinos?
–“S.O.: Hoy lunes 23 va a asistir la Guardia Civil, supuestamente la empresa ese mismo día va a sacar todos los escombros del sector que se demolió por error. Todo el fin de semana estuvieron sacando. Una vez retirados todo el derrumbe y los escombros vendrá Guardia de Auxilio para ver el estado en el que se encuentran las viviendas y determinar si son habitables. Si no pueden habitar sus viviendas les deberán dar una nueva.”